El Test de Tracción

Los arboles están expuestos a cargas del viento que deben soportar y transmitir de la copa hasta las raíces a través del tronco. En el caso de vientos fuertes los árboles pueden no ser capaces de soportar estas fuerzas y perder la parte superior de la copa, perder algunas ramas grandes ancladas directamente en el tronco o perder su conexión con el terreno y volcar.

En comparación con otros sistemas de evaluación, el test de tracción permite evaluar al mismo tiempo la resistencia a la rotura y la fuerza de anclaje al suelo, por tanto permite de una manera clara, profunda y entendible evaluar la estabilidad general de los árboles. La solidez y fiabilidad de los datos obtenidos mediante un test de tracción se ha confirmado en muchas ocasiones. Las últimas verificaciones se realizaron mediante un test práctico sobre 12 árboles, que fue llevado a cabo por un equipo de investigación de Fachverband Geprüfter Baumpfleger e.V dirigido por Bodo Siegert

La evaluación de la estabilidad de los árboles mediante los test de tracción se llevan a cabo basándose en el método desarrollado por Dr. Ing. Lothar Wessolly y Günter Sinn. Durante la prueba un árbol se expone a una carga que simula la fuerza del viento. El experto examina luego de que manera esta carga afecta la capacidad de carga de del tronco y sobre las fuerzas de anclaje de las raíces en el suelo. Los resultados proporcionan datos fiables, técnicamente bien fundados y a nivel de ingeniería de las condiciones de estabilidad del árbol evaluado.

Más detalladamente, en primer lugar se calcula la carga del viento que puede afectar a un árbol en función de la topografía que lo circunda, en el caso de que si diera un huracán (vientos de clase 12 según la escala de Beaufort). Posteriormente, mediante unos equipos de tracción adecuados, se ejerce sobre el tronco una carga de tracción que simula la fuerza del viento. La tracción se realiza de manera controlada en unidades estipuladas hasta un determinado límite. La reacción del árbol a esta tracción (fuerzas de compresión y tensión (extensión)) en las fibras de la parte periférica del tronco se miden mediante unos sensores que miden la deformación de las fibras (DynaStrain), al mismo tiempo la inclinación que se genera en la base del tronco se mide mediante un sensor del ángulo de inclinación (DynaInclino)

Los datos obtenidos, conjuntamente con los datos básicos del árbol, se introducen en el programa TSE para ser evaluados. La proyección de los datos obtenidos y la comparación con los datos empíricos (el comportamiento dinámico de la madera verde y la inclinación natural de los árboles) permite determinar la estabilidad y la resistencia a la fractura de los árboles frente a cargas de viento elevadas. El resultado de este proceso es un valor de seguridad que se usa para pronosticar la estabilidad y resistencia a la fractura de un árbol bajo unas condiciones similares a las de un viento huracanado.

 

TOP